01 de junio de 2018
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Cuando se habla de cirugía refractiva es referido a las diferentes técnicas que se utilizan para reducir o eliminar las gafas corrigiendo los defectos refractivos de la miopía y el astigmatismo.
La miopía no es considerada una enfermedad como tal, sino un defecto óptico de refracción. La miopía es un producto de variaciones biológicas que producen un fallo en la correlación entre los componentes del ojo.
El astigmatismo es un defecto de refracción. Consiste en que el ojo no es capaz de forma una imagen clara de un objeto y se debe a que la potencia del sistema óptico varía entre los meridianos principales.
Dos técnicas:
Técnica Láser: se realizan en la córnea modificando su curvatura. Aplicado a personas generalmente con graduaciones bastante altas (dioptrías de hasta 8).
Técnica lentes intraoculares: perfectas para pacientes con graduaciones más altas o que no pueden beneficiarse de las técnicas láser por distintos motivos.
Este tratamiento corrige los defectos visuales de manera más segura, menos invasiva y más eficaz.
Mediante una micro incisión de menos de 4mm, esta técnica aplica el láser directamente en el interior del ojo evitando el corte de las capas más superficiales. El tratamiento mantiene mejor la estructura corneal y, a su vez, reduce los riesgos.
La intervención con el Láser Smile consiste en cuatro pasos:
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